Causas de la Eyaculación Precoz

Recuerdo que siempre me quedaba callado y que no hablaba de mis experiencias hasta que alguno de mis amigos se dirigía a mi explícitamente para hacerme preguntas. Mi cara se iba poniendo roja, lo sé por el calor que sentía, que me iba subiendo de abajo hacia arriba y comenzaba a sentir un sudor cálido y molesto en todo mi cuerpo. Sabía que me estaba ruborizando. Me quedaba siempre sin palabras.   Primero porque me daba mucha vergüenza contar mis cosas íntimas, segundo porque aunque estábamos entre amigos no sentía la confianza necesaria para hablar de esas cosas ante más de una persona y tercero porque tampoco me gustaba andar hablando de mis cosas íntimas ya que estaba muy enamorado de mi novia y no quería que ella anduviera en boca de nadie.

Pero si que escuchaba a mis amigos y además habían algunos de ellos que eran un poco más grandes que yo. Ellos si hablaban bastante de sus ligues, de sus relaciones impetuosas y hasta de las posiciones en las que tenían o sentían más placer. Sinceramente me daba vergüenza ajena escuchar todo eso pero me daba pavor cuando ya todos habían contado sus últimas experiencias y comenzaban a mirarme a mí para ver si soltaba algo.

Yo creo que  lo hacían para divertirse conmigo porque sabiendo que era un chico muy tímido, y conociéndolo de sobra,  seguro se harían un festín imaginando mis torpes experiencias con mi chica en la cama.

Tampoco teníamos mucho tiempo para esas cosas ni disponíamos de un lugar seguro para hacerlo, siempre andábamos en búsqueda de un refugio para poder tener un momento a solas con mi novia. Y el tiempo no estaba de nuestra parte, parecía que el reloj corría a toda prisa y eso era lo que me marcaba el tiempo. Y así eran mis eyaculaciones, a toda prisa y a toda marcha. Mi  novia, al principio no me decía nada pero una vez me preguntó que sentía. No sé qué cara habré puesto pero cuando me miró ví su cara de lástima.

Fue ese empujón lo que me hizo tomar el valor que hacía falta para hablar con uno de mis amigos  de mayor confianza.

Le conté que era rápido como el viento pero que me daba cuenta que mi novia no sentía placer ya que no era como ellos hablaban de sus encuentros amorosos con sus chicas.

Me dijo que el placer venía con el tiempo, que necesitaba tiempo y que yo tenía que dárselo. De lo contrario difícilmente, ella podría sentir placer. A partir de ese momento presté más atención pero siempre era igual. Muchas veces ni siquiera llegaba a la penetración. Y cada día tenía más rabia de mi mismo. Estaba metido en un verdadero problema.

Entonces me hice esta pregunta ¿Por qué me está pasando esto? ni siquiera sabía que mi problema tenía un nombre…

Investigando entonces, fue cuando me dí cuenta de que mi problema tenía un nombre, se llamaba eyaculación precoz. 

Verdaderamente es lo primero que te preguntas y aunque fuese un adolescente sabes que todo es por algo…

Entonces cuáles habrían sido las causas de la eyaculación precoz y por qué me estaba afectando…me hice muchas preguntas y ojalá hubiera sabido todo lo que hoy sé en ese momento. Ojalá hubiera conocido a alguien que me hubiera ayudado o aconsejado en ese momento. Pero valió la pena el camino recorrido, te lo puedo asegurar y hoy quiero ayudar a que otras personas no pasen lo mismo por lo que yo pasé y así puedan evitar este problema…